La Granja de San Ildefonso es el pueblo que surgió junto con el Palacio Real, mandado construir por el monarca español Felipe V, el primero de Los Borbones, en el inicio del siglo XVIII. sin embargo, los términos de San Ildefonso y La Granja, parecen existir desde mucho antes. Algunas fuentes los situan en el reinado de Enrique IV de Castilla.

        Con la llegada de Los Borbones toda la zona se relanza y estos nombres empiezan a ser conocidos en toda la península ibérica, convirtiéndose La Granja de San Ildefonso en lugar de recreo y descanso de La Corte, y también de los Jefes del Estado español. Durante la II República fue un lugar muy visitado y utilizado por los gobernantes, entre los que destacan el que fuera presidente Manuel Azaña. También fue utilizado su reciento durante la dictadura de Franco.

       Sin embargo, hay otra vinculación emblemática de La Granja, y es la que la relaciona con el catolicismo ortodoxo del Padre Antonio Mª Claret, confesor de la Reina Isabel II. Tanto la monarca española, como sus hijas, son las más afamadas personalidades de este pequeño municipio de la provincia de Segovia, y dan nombre a varias calles y plazas del mismo.

                                 La iglesia de Los Dolores

        La iglesia de Ntra. Sra. de Los Dolores está realizada en sillería de granito, muy abundante en toda la zona. Es de planta rectangular y de estilo muy sobrio. Destaca por su abundante imaginería. Fue construida en la segunda mitad del siglo XVIII, por la Cofradía de Los Dolores, establecida en 1737. Tiene abundantes nichos y hornacinas para imágenes, algunas de las cuales son muy llamativas, como la de Santa Filomena, pues tienen pelo natural, algo que es muy común en las iglesias centro europeas, y que suele verse en muchos templos de Castilla.